Sucesos - 13/6/19 - 10:00 PM

Muere por cirugía plástica barata

La venezolana que residía en Panamá regresó a su país para realizarse la operación, pero en medio de la cirugía, murió

 

Por: Redacción / Critica -

Johana Solsiré Martínez Rodríguez, una venezolana de 22 años, que se había mudado a vivir a Panamá,  perdió la vida al regresar a su país a realizarse una cirugía plástica de bajo costo.
La joven, quería practicarse una cirugía, ya que había empezado una nueva vida en Panamá y estaba muy animada de su futuro,
La hermana de Solsiré, Frangeli Rodríguez, contó que la joven acudió junto a su madre, el pasado martes 11 de junio, al Centro Ambulatorio Iboma del edificio Páez en la avenida Urdaneta, Caracas, según una información publicada en Hispano Post.
Aproximadamente a las 11:30 a.m. inició la operación a cargo, tras realizar una cuestionable consulta a través de internet. Se trataba de una lipotransferencia de grasa en la zona abdominal, además de los glúteos, que le costó tres mil 800 dólares.
Horas más tarde, su madre, quien se hallaba en la sala de espera, se percató de la extraña visita de dos funcionarias del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc). Las oficiales femeninas ingresaron arbitrariamente al pabellón y permanecieron allí por varias horas más. La secretaria de Argote le recomendó “orar” porque su hija se había complicado.
Posteriormente, a la madre de Solsiré se le comunicó lo peor: había muerto por un supuesto “Paro respiratorio”.
Frangeli ha denunciado una serie de irregularidades tras el fallecimiento de su hermana.
En primer término, “los familiares que ingresaron al lugar, son familiares de este doctor”, afirma.
Frangeli comentó que Argote permanece en una de las sedes del Cicpc en una condición particular: “Le quitaron las esposas, lo sentaron en unos muebles (…), le llevan la comida, y hablan hasta del dinero que él va a pagar para salir de allí”.
Por otra parte, la hermana de Solsiré asegura que se le practicó una autopsia arbitraria y expedita, a pesar de que no se había entregado toda la documentación necesaria.
Por último, Frangeli acota que las autoridades del Cicpc que ha consultado utilizan el eufemismo “retenido” para referirse a Argote en lugar de aseverar que su condición es “detenido”.
Los familiares de Solsiré exigen una investigación justa y exhaustiva, mientras temen que pueda ser contaminada para beneficiar a Argote.

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